El yogur es nuestro aliado en la lucha contra los kilos de más, y es que recientes estudios han confirmado que el yogur nos ayuda en las dietas de adelgazamiento, uno de ellos es el realizado por el Dr Michael Zemel, del departamento de nutrición de la Universidad de Tennessee.
Su estudio ha demostrado que las leches fermentadas producen un gran efecto reductor sobre la grasa acumulada, especialmente la acumulada en el abdomen. El calcio funciona como un absorbente de grasas y su efecto es mayor cuando se ingieren productos lácteos en lugar de suplementos de calcio aislado.
Si se consume diariamente una cantidad de calorías controlada y que no sobrepasa a la cantidad que se gasta en las actividades físicas, el calcio no sólo ayuda a controlar el peso, sino que se asocia en forma activa con los mecanismos de consumo de lípidos, produciendo una reducción en la grasa corporal más acelerada que si sólo controlásemos la cantidad de calorías, sin consumir todo el calcio que necesitamos.
Así que para ganar la guerra contra los michelines toma yogur, aunque no está mal recordarte que con moderación o si no en lugar de funcionar como absorbe grasas acumularás unos kilitos de más.