Sobre la cetona de frambuesa he oído hablar mucho y de muy diferente manera, mientras que para unos es casi un milagro para conseguir perder peso y mucho más importante, perder grasa, otros consideran que sólo se trata de charlatanería y que no cumple lo que promete.
Como inconformista que soy y como son varias las personas que me has escrito para pedirme mi opinión he decido investigar y probarlo, esta vez en las carnes de Óscar (que siempre lo acabo metiendo en todos mis líos :P)
¿Qué me he encontrado con la cetona de frambuesa?
Pues al igual que me pasó cuando investigué sobre la Garcinía, en este caso también me he dado cuenta de que existen muchos tipos de cetonas de frambuesa, y aunque todas prometen lo mismo no todas son iguales y tomar una u otra puede hacer la gran diferencia.
¿Qué promete la cetona de frambuesa?
La cetona de frambuesa o Raspberry Ketone es un principio activo que se encuentra en las frambuesas rojas (de ahí su nombre :P) que promete ayudar a aumentar el metabolismo, o lo que es lo mismo hace que tu cuerpo necesite más energía para vivir y por lo tanto quemas más calorías aunque estés sin hacer nada.
¿Y cómo se supone que consigue aumentar el metabolismo?
La cetona de frambuesa hace la hormona que se encarga de regular los niveles de glucosa y la degradación de los adipocitos (hormona adiponectina) se libere en mayor cantidad, y esta hormona le manda al cerebro la señal para que nuestro cuerpo empiece a utilizar como combustible las reservas que tenemos almacenadas.
La cetona de frambuesa también actúa como termogénico por lo que aumenta nuestra temperatura corporal, lo que a su vez provoca que aumente el metabolismo y la combustión de grasa.
Otra de las características de la cetona de frambuesa es que disminuye la ansiedad por comer y los ataques de hambre.
Una vez que sabemos que es lo que promete… llegó el momento de probarla, pero… ¿cuál elijo?
Igual que hice con la Garcinía no compré la primera cetona que vi en el supermercado, primero me informé bien porque como he dicho antes aunque todas parecen iguales no lo son y si quiero probar si funcionan lo tengo que hacer con la mejor 🙂
En este caso elegí la cetona de frambuesa de Formafit, esta cetona sólo tiene extracto puro de frambuesa con un mínimo de 98% de cetonas, y aunque en su web ya decían que era mucho más que la de otras que había en el mercado cuando empecé a investigar me di cuenta por mi misma de que era verdad 😛
Buceé por un montón de foros y todo el mundo que había comprado aquí estaba muy contento, pero como para mi no fue suficiente decidí ponerme en contacto con ellos, y para mi sorpresa me atendieron de maravilla resolviendo todas mis dudas (y os advierto que fueron unas cuentas), las respuestas además eran casi instantáneas y ver que están detrás de lo que hacen me dio mucha credibilidad.
Incluso me enteré que entre sus clientes está el Vaticano, y eso sí que no me lo esperaba 😛
Y llegaron las pastillas a casa, es el momento de la verdad…
El envío fue rapidísimo y el mismo día que llegaron el Santo Óscar empezó a tomarlas, hay que tomar dos pastillas al día, una con el desayuno y otra con la comida.
Como sólo se trataba de una prueba no hace mucho que las está tomando y aquí cometí el error de no apuntar el día exacto en que empezó, pero los resultados han sido rápidos, en menos de una semana completa ya se notaban los resultados, y como una imagen dice más que mil palabras os dejo la gráfica de la evolución de su peso.
Aclaraciones súper importantes.
Aunque las cetonas de frambuesas a Óscar le han funcionado no quiere decir que sean milagrosas y por el simple hecho de tomarlas vayas a perder peso, si te atiborras de comida basura y no aprendes a comer bien no vas a notar los resultados, y como diría mi madre… «los milagros a Fátima».
Sólo hay que tomar una pastilla con el desayuno y otra con la comida, tomar más no te hará perder más peso.
Y como cualquier suplemento alimenticio no puedes empezar a tomarlo sin consultar primero con tu médico si crees que estás embarazada, tienes un bebé al que le estás dando el pecho o estás tomando otros medicamentos con los que puede interaccionar, y por supuesto si eres alérgico a las frambuesas que ni se te pase por la cabeza tomarlas.
Envíos gratis.
Ya os comenté que en mi labor de investigación me pose directamente en contacto con Formafit, y para poneros más fácil que también las podáis tomar con el código BikiFree las podéis comprar sin que os cobren los gastos de envío (el cupón caduca el 15 de julio, así que si quieres probar la Raspberry Ketone prisa)