De nuevo vuelvo a rendir cuentas de la actividad que he tenido la semana pasada.
La semana pasada ha sido un poco especial porque he empezado a introducir de nuevo entrenamiento más intenso que he combinado con caminatas.
Como he arrastrado dolor de costillas un par de meses me he querido medir haciendo Insanity 3 días (en lugar de los 6 que marca la rutina) y aunque en esfuerzos muy intensos notaba la costilla, en general el resultado ha sido más que satisfactorio, eso sí, he tenido muuuuuuuuuchas agujetas 🙂
Esta sema también estoy en «modo transicción» y la semana que viene espero poder empezar a entrenar a tope. Mientras tanto, os dejo con mis resultados de esta semana.
Insignias conseguidas:
Insignias por pasos: La insignia de pasos más alta que he conseguido ha sido por dar 25000 pasos, ¡está visto que la de 30000 se me resiste!
Insignias por plantas: Bueno esta semana he estado un poco floja subiendo escaleras, y mi mayor insignia la he conseguido por subir 25 pantas. Esta semana mi récord subiendo escaleras ha estado en las 36 plantas, pero la media ha sido de 23 plantas diarias, Os puedo asegurar que con las agujetas que tenía en las piernas ha sido un gran reto.
Insignias especiales: Este capítulo se ha quedado en blanco, aunque ya os adelanto que por poco tiempo 😉
En total esta semana he andado 91,42 kilómetros y he dado, nada más y nada menos, que 130408 pasos. Además he quemado en torno a 15938 calorías.
Mi día más activo de la semana fue el martes, 19 de febrero, y el que me moví menos fue el sábado 23 de febrero.
La buena noticia es que a pesar de los desfases culinarios de la semana anterior no he ganado ni un gramo, es más he perdido 100.
El registro de alimentos lo utilizo para controlarme y saber cómo lo estoy haciendo, durante el día introduzco TODO lo que como (bueno o casi todo), pero por la noche, que ya sé lo que me puedo permitir y el déficit calórico que llevo, me suelo relajar y se me olvida anotarlo, y lo mismo me pasa con los fines de semana, cuando como con mi mami, aunque hay una aplicación para el iPhone del Fitbit no me gusta usarla para el registro de alimentos y cuando llego a casa se me olvida anotar lo que he comido :(, así que nadie se asuste si ve que esta semana sólo he ingerido 5614 calorías, que promoto que como bien 🙂
Y esto es todo amigos, ¿qué tal os ha ido la semana a vosotros?
Willie dice
Hola!!
ME alegra ver que sigues consistentemente con tu vida activa. Como nos preguntas qué tal nosotros/as, te cuento: en mi caso, esta semana no ha estado mal tampoco, tal vez por encima de mi vida normal, porque me surgieron un par de asuntos en dos ocasiones y eso hizo que caminase bastante más de lo que suelo acostumbrar, que viene a ser más del rango de 20.000 pasos de media al día como tú. Es más, tanto caminé el jueves pasado que logré las insignias de 50.000 y 55.000 pasos. En total, ese día me calcé 48 kilómetros y sin hacer una etapa del Camino de Santiago ni nada, oye. 🙂 En cuanto a pasos totales, 188.000, 157 kilómetros en la semana, 402 plantas subidas (media 57, máximas 86) y 24.000 kcal quemadas. Lo que tú haces es dormir bastante mejor que yo, pues me sacas una media de ¡dos horas diarias más de sueño!, dado que yo duermo de media seis horas y veinte minutos al día. En cuanto a calorías, yo no ingreso los alimentos. Cómo lo que el hambre pide, que suele ser algo entre demasiado y desmesurado, je, je… Vamos, que he ganado esta semana pasada un kilo doscientos gramos. De todas formas, mi análisis corporal dice que he perdido grasa, con lo que no me importa el peso. El agua cormporal, los huesos y el cerebro también pesan, y no me gustaría perderlos por el camino de la salud. Suena algo incosistente perder la salud buscándola, como suele ser el caso a veces…
Por otro lado, salvo caminar por falta de medio de transporte y la mala fortuna que tengo de no haber nacido rico y haberme echado en la mala costumbre de tener que trabajar lo que puedo y me dejan para sobrevivir, no hago ejercicio extra o estructurado. Vamos, que lo del insanity, pues eso, como su nombre indica, una locura, chica. ¡Ya te estoy envidiando en tu energía vital!, ja, ja, ja…
Nos vemos en tu próxima semana, que siempre nos asombras.
Raquel dice
¿Energía vital? eso lo tuyo que andas más que el «correcaminos» jajajaja, a mi se me atragantan los 30000 pasos y tú superas los 55000, eso se llama energía vital.
Hace casi un año mi padre, al que me sentía muy unida, murió de forma un tanto inesperada y el Insanity se convirtió en mi vía de escape, te hace esforzarte tanto que lo das todo, y te deshace de todo lo malo que pasa por tu cabeza, ya sabes, me hace liberar endorfinas al máximo, así que cuando terminas te sientes bien 🙂
Tienes toda la razón en lo de perder la salud intentando conseguirla, no hay nada peor que las obsesiones, una cosa es estar incentivado y marcarte objetivos reales y otra obsesionarte en retos imposibles.
Me despido otorgándote la insignia de caminante del mes, jajajaja
Willie dice
Ups! Gracias! Esa insignia si que no la dan en FitBit, y como insignia especial me siento casi tan emocionado como una Scout 😀
Por cierto, lo de caminante del mes, pues es un halago por tu parte. Acabo de ver mi historial y sí, este mes (tú misma lo puedes comprobar en la web) de febrero he caminado 615 km. No sé si será bueno para la salud, pero no gano para zapatos, ja, ja…
De todas formas. ya comenté que más que ejercitarme, tengo que andar a la fuerza para ir a trabajar y todas las demás cosas cotidianas. Puede parecer tontería, pero cuando vives en los lindes del núcleo urbano y tienes que caminar varios kilómetros para llegar a trabajar, más un trabajo que exíge constante supervisión de grupos de personas en cinco plantas diferentes y que te requieren de forma constante mas aleatoria, añadido a las tonterías diarias de ir a comprar, recados, salidas… Los kilómetros caen solos. Lo que no tendría es tiempo de ir a pasear o hacer ejercicio, la verdad. Ya suelo dormir entre 4 y 6 horas cada día y aún así ando algo justo. Si añadimos que ya voy por la mitad de la quinta década de mi vida… pues no sé como no caigo fulminado, jua, jua, jua… Casi que después de leerme y ser consciente de lo patético de mi día a día, reitero mi agradecimiento por otorgarme esa insigni-a especial para un insigni-ficante personaje que sobrevive «paso a paso», ja, ja, ja…
En fin, lo dicho: enhorabuena a ti, sinceramente. Lo siento por lo de tu padre (lo leí en tu «biografía» de la página), mas creo que lo has encajado con entereza y madurez. Has conseguido sublimar tus penas y frustración ante la impotencia dándole una salida inmejorable.
Y lo que han ganado las lectoras que tienes con poder leerte gracias a tu proyecto.
Nos vemos… en el camino 🙂