A veces sólo necesitas 20 segundos para cambiar tu vida. Puede que pienses que es imposible que cambiar tu vida en tan poco tiempo, son sólo unos segundos ¿Pero sabes qué? En la mayoría de las ocasiones de 20 segundos son más que suficientes para cambiar la vida.
No te lo crees, pues atento.
20 segundos para cambiar tu vida.
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En la mayoría de las ocasiones no conseguimos nuestros objetivos porque el miedo nos paraliza.
¿Cuántas veces has sentido miedo a hacer algo? Puede que no seas ni siquiera consciente de que tienes miedo, pero hay algo que te frena.
Así que, si hay algo que te asusta20 segundos de coraje, y aquí son unos valientes, 20 segundos de valentía van a ser más que suficientes para que puedas lograr tu objetivo.
La toma de decisiones
Seguramente nunca te hayas parado a pensarlo pero si lo analizas nuestro día a día es una lista interminable de decisiones que tenemos que tomar. Y son decisiones que requieren menos de 20segundos. ¿Qué voy a tomar para desayunar? ¿Qué rutina de entrenamiento voy a hacer hoy? ¿Al lado de que me siento en el autobús? ¿En el super que articulo elijo? ¿Llamo a mi madre o la llamo más tarde? ¿Le digo esa persona que me gusta, que me gusta?
Al final, como ves todo son decisiones. Y algunas de esas, aunque sean decisiones que necesitas poco tiempo para tomarlas, te pueden cambiar la vida de una forma muy significativa.
A veces tenemos la sensación de que el camino de nuestra vida está muy marcado. Pero no es así.
Todo puede cambiar en menos de 20 segundos.
Cada nueva decisión que tomamos nos puede llevar hacia un lado del camino o hacia otro, y tú piensas que sigues yendo recto, pero no.
El miedo al cambio
Los humanos por naturaleza somos miedosos, nos asusta el cambio y tendemos a acomodarnos.
¿Cuántas veces has oído que tienes que salir de tu zona de confort?
Pero una cosa es decirlo y otra cosa es realmente hacerlo. Y al final, nos pasamos el día evitando hacer cosas que nos asustan.
Aveces no hacemos un ejercicio porque pensamos que se pueden reír de nosotros en el gimnasio, a veces no hablamos con la persona que nos gusta porque tenemos miedo a que nos rechace, y otras veces acabamos haciendo cosas que no queremos hacer por no sentirnos rechazados.
Pero si realmente quieres conseguir las cosas que de verdad deseas, vas a tener que intentar romper esos miedos y salir de esos mecanismos que nos mantienen atascados, que nos hacen no querer hacerlas cosas que nos dan miedo. Yeso nos va a llevar menos de 20 segundos.
Los 20 segundos de valor
Cuando utilizas 20 segundos para hacer algo que en circunstancias normales no hubieras hecho te vas a dar cuenta que pasan cosas maravillosas. Van a pasar tres cosas que sin duda son sorprendentes.
La cosa sale mal
La primera, cuando dices que sí a algo que normalmente hubieras dicho que no, y no funciona, te vuelves más resistente.
Te das cuenta que no ha pasado nada, no se ha acabado el mundo. ¿Qué más da? Y al darte cuenta de que no ha sido tan terrorífico como pensabas, que no ha pasado nada, es más probable que en el futuro te atrevas a hacer cosas que antes no te atrevías.
El fracaso no es tan malo.
Es mucho peor no intentarlo que haberlo intentado y fracasar.
La cosa sale bien
Vale, ya has visto que si sale mal el fracaso no es tan malo, pero es que puede salir bien. Y si sale bien tu vida va a empezar a ser mejor porque has sido más valiente.
La mayoría de las cosas buenas que tienes en la vida son fruto de una decisión que has tomado. Tus amigos, una relación, el trabajo… Y seguramente muchas de esas cosas en su momento te dieron miedo.
Os voy a poner mi ejemplo.
Mi caso
No os podéis ni imaginar lo tímida que soy, soy muy vergonzosa. Y de hecho me sigo poniendo muy nerviosa cada vez que grabo un nuevo vídeo. Pero sin embargo, un día tomé la decisión de ponerme delante de la cámara y contar al mundo las cosas que yo quería contar.
Os puedo asegurar que me puse mala de los nervios, me dolía la barriga, estaba súper nerviosa, sudaba…
Mis primeros vídeos son un auténtico desastre, aparte de que los nervios se apoderaban de mí, técnicamente eran, por ser buena, mejorables. Pero aún así los grabé y lo subí a YouTube y nunca imaginé que esos vídeos pudieran darme tanto.
No sabéis lo gratificante que es para mí haber conseguido que haya personas como tú que ven mis vídeos, se molestan en dejarme un comentario, o se molestan en darme las gracias y decirme cosas bonitas. Eso ha cambiado mi vida por completo. Me ha hecho enormemente feliz.
Otro ejemplo, os he hablado muchas veces de Óscar. Llevamos 19 años juntos pero el primer día que quedamos yo no quería ir a la cita estaba muy nerviosa y gracias a mi amiga Sara, ella me convenció para que fuera. Yo le dije que pasamos por allí, si estaba genial pero sino, nos íbamos y no esperábamos.
Pasamos por allí y ahí estaba Óscar. Y esa decisión de pasar por ahí ha hecho que llevemos 19 años juntos. Y sin duda, esa es la decisión que más ha cambiado mi vida.
¿Qué hubiera pasado si mi amiga Sara no me hubiera animado a ir? ¿Qué hubiera pasado si no lo hubiera hecho?
Nunca te preguntes que hubiera pasado
Pues esta es la tercera cosa. Nunca te tienes que preguntar qué hubiera pasado si…
Nunca piensas en qué hubiera pasado si lo hubieras hecho, hazlo.
Vale, la teoría es sencilla, 20 segundos te pueden cambiar la vida y solo tienes que ser valiente durante esos 20 segundos. ¿Pero cómo lo pones de verdad en práctica en tu vida? Atento.
¿Cómo poner en práctica los 20 minutos de valentía?
Lo primero que tienes quehacer es identificar lo que te aterroriza ¿Qué te está asustando?
Tienes que enfocarte en una sola acción específica y eso te va a llevar menos de20 segundos. Pero tienes que intentar hacer eso que te da miedo.
Si necesitas a un amigo para que te ayude a hacer eso que te da miedo, como a mí me ayudó Sara, hazlo involucra a ese amigo, seguro que está encantado de ayudarte.
Solamente céntrate durante estos 20 segundos para tomar una decisión diferente a la que hubieras tomado en cualquier otro momento de tu vida y luego hazlo.
Algunos ejemplos prácticos
Ejemplo 1: La sala de pesas
A muchas chicas algo que les da miedo es entrar en la zona de peso libre de un gimnasio.
Ni lo pienses, dirígete hacia allá, coge una mancuerna y empieza a hacer tu primer ejercicio. Ya verás como una vez que empieces te vas a dar cuenta que no es para tanto, que no pasa nada, que nadie se está riendo de ti, que nadie te está mirando.
Esos miedos sólo estaban en tu cabeza.
¡Qué más da la gente que te rodea! Si están concentrados todos en hacer sus ejercicios. Y si te miran, que te miren.
Ejemplo 2: No puedo entrenar
¿No crees que puedas empezara entrenar? Cambia ese pensamiento 20 segundos.
Enfócate, cámbiate, ponte tu ropa de entrenamiento y empieza. Ya verás como ese día que no quieres entrenar el entrenamiento va a ser más gratificante de lo normal.
¿No te ha pasado nunca que el día que no querías entrenar y has entrenado te has sentido mejor que nunca?
Ejemplo 3: Miedo a hablar en público
¿Te da miedo hablar en público? A mí también.
Es posible que tengas muchas cosas interesantes que contar e incluso hayas pensado en crear un canal de YouTube pero, el miedo te echa para atrás. Ármate de valor, utiliza tus 20 segundos de coraje, tus 20 segundos para valientes, enciende la cámara y empieza a hablar.
Estáis solamente la cámara y tu. Di lo que tengas que decir, si te equivocas lo repites, no pasa nada. Pero esos 20 segundos de coraje te pueden cambiar la vida tanto como me la han cambiado a mí.
Ejemplo 4: Alguien te gusta
¿Ves al chico o la chica que te gusta pero nunca le dices nada? Utiliza tus 20 segundos de coraje.
No te lo pienses, acércate y dile hola, ya verás como la conversación surge y a lo mejor te llevas una sorpresa, a lo mejor tú también le gustas.
La cosa es que nunca te tengas que preguntar qué hubiera pasado si…
Ya sabéis que a mí me gustan mucho las frases célebres. De hecho, no sé si lo he contado alguna vez pero mi andadura en internet, mis primeros pasos en la blogosfera fueron con un blog de frases célebres, era mi hobby. Y hay una frase que dice:«Un viaje de mil millas comienza con un solo paso».
Esos 20 segundos de coraje son tu primer paso .
¿Me cuentas que vas a hacer con tus primeros 20 segundos de valentía? ¿Vas a ir a esa clase del gimnasio a la que nunca te has atrevido a ir? ¿Temdrás más iniciativa en el trabajo? ¿Te vas a atrever a probar alguna comida que normalmente no probarías? ¿O quizá vas a dar el primer paso para hablar con esa persona que te gusta?
Recuerda que el cambio puede suceder en un instante.