¿Has conseguido bajar algunos kilos pero ahora estás estancado? ¿No pierdes peso al ritmo que te gustaría? Seguramente hay cosas que haces y no te dejan adelgazar.
Y para que tú no vuelvas a cometer esos errores que no te dejan adelgazar hoy te voy a contar las 5 cosas que haces y no te dejan adelgazar.
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5 Cosas que haces y no te dejan adelgazar:
Sólo te cuidas de lunes a viernes
El primer error es el que comete más gente.
Lo haces espectacular de lunes a viernes. Comes genial, no te permites ningún exceso, o muy poquitos, entrenas, pero llega el fin de semana y… ¡Locura!, lo das todo, y no en el buen sentido que digamos.
Y es que después de una semana de privaciones el cuerpo te pide una recompensa.
Ya te he dicho muchas veces que no pasa nada porque de vez en cuando te pases. Eso es una parte más del proceso. El problema es que de viernes a lunes tu fin de semana se convierta en un festival de calorías. Dulces, comida basura, chucherías, alcohol… Y la cosa empeora si encima esos días no entrenas.
Seguramente ni seas consciente de que eso es un problema porque has oído muchas veces hablar de un concepto conocido como «Cheat Meal». Aquí te he hablado de ello.
Hay mucha gente que defiende que puedes hacer un cheat meal a la semana. Pero claro, es que se trata de uno, no de un fin de semana completo.
¿Cuántas veces te pasas durante el fin de semana? Posiblemente sea el viernes por la noche, sábado por la mañana, sábado a mediodía, sábado por la noche, domingo para mañana, domingo a mediodía y domingo por la noche. ¿Cuántas comidas son esas? Más de una verdad. Mal, muy mal.
Puedes tener un déficit calórico de lunes a viernes pero si cuando llega el fin de semana desfasas, por mucho déficit calórico que hayas tenido de lunes al viernes, todo se va a descompensar y así no vas a progresar.
¿La solución más rápida?
La planificación. Si el fin de semana te quieres dar un caprichito extra está bien, hazlo. Pero solo uno.
Puedes cenar pizza con tus amigos el viernes perfectamente sin preocuparte de contar calorías. Pero el sábado tienes que volver a hacer lo de siempre. Tienes que volver a tu déficit calórico o no vas a conseguir deshacerte de esa grasa que se empeña en quedarse en tu cuerpo.
Si llevas tiempo muy estancado y te cuesta mucho privarte los fines de semana, lo que yo te propongo es que vayas haciendo esos cambios muy poco a poco. ¿Qué quiere decir eso? Sigue con tus entrenamientos de lunes a viernes como hasta ahora. Y el fin de semana si te gusta disfrutar con tu familia o con tus amigos y lo haces comiendo, intentar ir poco a poco sustituyendo ese exceso de comida.
Por ejemplo, lo que te decía antes de la pizza. El viernes por la noche quedas con tus amigos para cenar pizza, pues en lugar de acabar emponzoñado y comerte una pieza entera tú solito intenta comerte una ración menos.
Yo, reconozco, que los fines de semana no cuido tanto mi alimentación.
Los sábados y los domingos suelo ir a comer a casa de mi madre y aunque ella me prepare comida saludable, que no siempre es el caso.
Allí siempre acabo comiendo un poco más de la cuenta. Ya sabes que para una madre nunca comes suficiente, te llenan el plato y te lo vuelven a llenar y a llenar y a llenar. Las madres no tienen fin con la comida.
¿Qué he hecho que me ha ayudado?
Pues sí sé que los fines de semana voy a comer más, los fines de semana intento moverme más. Antes siempre mi día de descanso de entrenamiento solía hacer los domingos, pero eso lo he cambiado.
Prefiero descansar de mi entrenamiento un día de diario, que sé que voy a cuidar mi dieta porque hago yo la comida, y los fines de semana intentar entrenar. Pero como sé que además los fines de semana voy a comer más, aparte del entrenamiento salgo a pasear todo lo que puedo. Es una forma fantástica de compensar.
Te juro que desde que he cambiado esto lo noto.
Y otra cosa que he hecho es romperle el coranzocito a mi madre y no acompañarle con el helado de después de comer. Lo siento mamá.
Estrés por la comida
La segunda cosa que puede estar fallando está relacionada con el punto anterior. Tienes estrés por la comida.
Algo que es muy común, yo creo que todos hemos pasado por eso en algún momento, es que cuando decidimos que queremos cambiar nuestro cuerpo nos obsesionamos. Y ese puede ser tu gran obstáculo.
Las obsesiones nunca van a traer nada bueno.
Y es que en la cabeza nos puede jugar muy malas pasadas. Sé que te puede parecer un topicazo pero tienes que intentar disfrutar del proceso.
Disfruta de cada pequeño paso que vas dando para alcanzar tu objetivo. Si solamente estás pensando en cómo evitar comerte un donut por ejemplo, te vas a acabar obsesionado con ese donut. Y ahí es cuando empiezan los problemas.
¿Qué pasa si te obsesionas?
Te vas a desmotivar, vas a sentir una ansiedad por la comida desproporcionada. Vas a pensar que es que ese cambio que tú buscas no termina de llegar y eso te va a hacer estar en bucle con unos pensamientos que no, no te van a ayudar nada.
Que te quede claro: Un simple donut en toda una dieta semanal no te va a ocasionar absolutamente nada. No va a tener ningún tipo de impacto.
Como te he dicho antes, los cambios los tienes que ir haciendo poco a poco. Así no sentirás tanta ansiedad por la comida.
Si cambias tu alimentación de golpe te va a costar, va a ser mucho más duro. Pero si vas haciendo los cambios poco a poco y vas mejorando de forma progresiva va a ser mucho más sencillo.
Así que si un día te entran unas ganas irrefrenables de tomarte un donut, no te lo puedes sacar de la cabeza, tómatelo, no pasa nada. Pero es muy importante que después no te sientas culpable. No pasa nada.
Lo que importa es lo que hacemos la mayoría de las veces no las excepciones.
Las excepciones nos pueden ayudar a seguir con nuestro estilo de vida saludable. Si un día te comes algo que no deberías, sin remordimientos, después tú sigue haciéndolo bien, que no pasa absolutamente nada.
Te pesas continuamente
El tercer error, te pasas el día pesándote. ¿Por qué? Pues porque la báscula miente más que la bolsa de valores.
La báscula es una mentirosa, no te puedes hacer caso de ella. Aquí hablo mucho más a fondo de este tema y te doy tres motivos por los que no debes pesarte.
La báscula no sabe qué está pasando en tu cuerpo, si solo te fías de ella te vas a desmotivar.
«El músculo pesa más que la grasa»
Si estás haciendo las cosas bien. Si estás cuidando la alimentación y estás entrenando, sobre todo si haces ejercicios de fuerza, hay una frase que me gusta decir aunque no es algo literal: «El músculo pesa más que la grasa».
Ya sé que un kilo de músculo pesa lo mismo que un kilo de grasa. Pero no ocupan lo mismo.
Un kilo del músculo apenas ocupa espacio en tu cuerpo, mientras que un kilo de grasa tiene un volumen muy grande. Eso qué quiere decir, pues que aunque incluso peses más porque ha ganado músculo te vas a ver mucho más delgado y al final lo que importa es cómo te ves, no lo que pesas.
Estás haciendo esto por una cuestión de salud, también hay mucha gente que lo hace por una cuestión de estética. Pero en ambos casos la estética o salud pasan por no perder tu masa muscular.
Así que no te obsesiones con el numerito que te devuelve la báscula por favor.
Mejores formas de medir tus progresos
La mejor forma de medir tus progresos es midiendo tus contornos con una cinta métrica.
O algo que todavía me gusta aún más. Hazte 3 fotos, y háztelas con poca ropa, te las puedes hacer en bañador, bikini, ropa interior, como tú quieras. ¿Cómo te tienes que hacer las fotos? Muy fácil una de frente, otra de perfil y otra de espalda.
Si te haces estas tres fotos, yo te recomiendo que las hagas cada dos meses más o menos, y las vas comparando entre sí vas a poder ir viendo tus cambios. Eso sí que te va a dar información real y no la báscula.
También otro buen indicador de que vas por el buen camino es tu ropa. Si hace unos meses no te podías abrochar un pantalón no te quedaba muy tirante y ahora te abrocha sin problemas es que lo estás haciendo bien. Aunque peses más.
Por favor deja de pesarte.
No tienes un entrenamiento optimizado
El cuarto error, la forma en la que estás entrenando. Porque puede que estés entrenando pero no lo estés haciendo bien.
Ni sé la de veces que me habéis preguntado los ejercicios que queman más más calorías. Me lo habéis preguntado tantas veces que incluso he hecho un vídeo sobre tema, aquí lo tienes.
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Pero que un ejercicio determinado queme muchas calorías, por ejemplo como correr, no quiere decir que sea el que tienes que hacer para tu objetivo.
Si de verdad estás buscando adelgazar, si quieres deshacerte del exceso de grasa corporal tienes que tener un entrenamiento integral.
¿Qué quiere decir esto? Pues que tienes que hacer por una parte ejercicios de fuerza, esos que te van a poner tus músculos a tono, porque el músculo es el mayor enemigo de la grasa, y también tienes que hacer ejercicios de cardio.
Pero un error muy habitual cuando queremos adelgazar es centrarnos solamente en el cardio y no, ese es un error.
Cardio + Fuerza
No puedes hacer solamente cardio. Es cierto que los ejercicios de cardio queman más calorías mientras los ejecutas que los ejercicios de pesas. Pero en el efecto post combustión, ay amigo, ahí las cosas cambian.
Con un entrenamiento de fuerza pesado vas a lograr un efecto post combustión de unas 48 horas. ¿Qué quiere decir esto? Pues que puedes seguir con tu metabolismo activado. Es decir, quemando más calorías aunque no estés entrenando hasta 48 horas después de haber acabado tu entrenamiento.
Mientras que con el ejercicio cardiovascular dejas de entrenar y dejas de quemar calorías.
Así que eso de hacer los ejercicios que más calorías queman para adelgazar más como ves no es una ciencia exacta. No es tan fácil.
Además hacer ejercicios de fuerza, ejercicios con pesas, va a hacer que tu cuerpo se vea mucho más bonito. Va a potenciar tus curvas naturales y te vas a ver mejor. Créeme de verdad tú solamente fíjate en la gente de tu alrededor.
Hay mucha gente que hace solamente ejercicio de cardio que tiene barriguilla, que no se ve bien, incluso aunque corra maratones que es algo súper exigente. Pero la gente que hace pesas los ves a primera vista y notas como la camiseta le queda genial.
Cazador de productos milagro
Y el quinto error me parece uno de los más perjudiciales, ser un buscador de productos ‘milagro’.
¿Cuánta gente hay que siempre está buscando el truco? Y para eso busca lo último en rutinas de entrenamiento, en pastillas adelgazantes, saunas milagrosas que te hacen perder peso
Que te quede clarito, en esto del fitness los milagros no existen. Si quieres conseguir resultados vas a tener que trabajártelos. Eso es así.
Si alguien te promete que comiendo tres donuts diarios vas a ponerte cachas ya te lo digo, te está mintiendo. No le hagas caso, huye, es un estafador.
Así que si hasta ahora estabas estancado y no conseguías adelgazar atento. Presta atención a estos errores y seguramente que te des cuenta que cometías alguno de ellos.