No hay duda de que el aceite de coco está de moda y nos lo encontramos por todas partes.
Son muchos los que alaban sus bondades. Pero ¿realmente es tan saludable el este aceite como dicen?
No hace tantos años el aceite de coco nos lo vendieron como una de las peores cosas que le podíamos dar a nuestro cuerpo. Sin embargo, ahora parece que es una fórmula mágica. Parece que si lo tomamos todos los males se van a curar.
Pero ¿sabes la verdad? Ni una cosa ni la otra.
¿Es tan bueno como dicen el aceite de coco?
Para empezar tenemos que partir de la base de que no todos los aceites de coco son iguales. Los botes de aceite de coco virgen que te puedes encontrar hoy en el mercado nada tienen que ver con las grasas de coco parcialmente hidrogenadas que nos encontramos en la década de los 80.
Entre las cualidades que seguramente has oído del aceite de coco se encuentran que eleva el metabolismo, nos protege de las enfermedades e incluso nos ayuda a prevenir el alzhéimer.
Pero lo cierto es que por muy prometedor que pueda parecer hay que tener mucho cuidado con estas afirmaciones.
No estoy diciendo que el aceite de coco no sea sano. Pero tampoco tiene tantas propiedades como nos están vendiendo.
El aceite de coco una grasa saturada. Esto quiere decir que a temperatura ambiente se vuelve sólida y con el calor se vuelve líquida. Ya hemos comentado muchas veces que las grasas saturadas no son la mejor opción para nuestra salud.
Pero el caso del aceite de coco es un poquito especial. Las grasas saturadas naturales como las que se encuentran en este aceite sí se pueden tener beneficios para la salud.
Los defensores del aceite de coco como un alimento casi mágico asocian muchas de sus beneficios a un componente llamado ácido láurico que contiene. Algo que nuestro cuerpo convertiría en otra sustancia con propiedades antibacterianas y antiprotozoarios. Lo que traducido al castellano querría decir que es capaz de destruir los virus recubiertos de lípidos como por ejemplo el VIH, el herpes, el sarampión o la gripe.
¿Qué dicen los estudios sobre el aceite de coco?
Lo cierto es que igual que hay muchos estudios que hablan de los beneficios del aceite de coco también hay muchos estudios y hay muchos profesionales de la salud que advierten que esta no es la mejor grasa para nuestro cuerpo. Y que no es mejor que los aceites vegetales líquidos como por ejemplo el aceite de oliva.
Yo ya os he comentado que para mí, sin lugar a dudas, la mejor grasa que existe es el ácido oleico y aquí os he explicado porque.
El aceite de coco tiene un total de 14 gramos de grasa por cada cucharada. Y 12 de esos gramos de grasa son grasas saturadas.
Para tener un estilo de vida saludable la Asociación Norteamericana del Corazón recomienda que no sobrepases los 13 gramos diarios de este tipo de grasa.
Entonces, si consumes aceite de coco más vale que lo hagas con moderación.
¿Qué beneficios se le atribuyen al aceite de coco?
Entre los beneficios que se le atribuye al aceite de coco es que eleva el colesterol bueno. Pero ese es un arma de doble filo porque igual que eleva el colesterol bueno también eleva el malo.
Otra de las virtudes de este tipo de aceite es que contiene antioxidantes. Pero estos también lo pueden obtener a través de las frutas, las verduras y los granos enteros.
Y muchas de las bondades que se atribuyen a este tipo de aceite no están demostradas. Simplemente han corrido como la pólvora de boca en boca, pero no hay nada que demuestre que las tengan.
Conclusión sobre el aceite de coco.
El aceite de coco sí que es un aceite más saludable que otros. Y sí que puede tener ciertos beneficios para la salud pero no debes abusar de ella.
Si tomas aceite de coco lo tienes que hacer una forma puntual, o al menos moderada. Es mejor que te centres en el consumo diario de otro tipo de grasas. Como la del aceite de oliva, sobre todo si es virgen extra.
Nuestras grasas de referencia diarias, deberían ser el aceite de oliva, los frutos secos, el pescado o el aguacate.
Así que, hasta que existan más pruebas que demuestren los efectos saludables del aceite de coco, la recomendación es que lo consuma con moderación si es de tu agrado, porque es verdad que le puede aportar un toque exótico a tus platos, pero no reemplazándolo como la vía alternativa más saludable, para tus grasas.
Eso sí, el aceite de coco tiene unas propiedades cosméticas para hidratar el pelo o la piel que sí que te pueden venir muy bien.