Cada vez más, el mundo del fitness se presenta como un refugio, un lugar donde podemos empoderarnos, construir nuestra mejor versión y, sobre todo, cuidar de nuestra salud.
Sin embargo, no todo lo que brilla es oro. Las mujeres, en particular, nos encontramos navegando en un mar de información, mitos, y -seamos honestas- ciertas expectativas culturales que, en lugar de ayudarnos, pueden terminar jugando en nuestra contra.
Por eso, quiero compartir contigo algunos errores comunes que muchas de nosotras cometemos al iniciar este viaje fitness.
¡Toma nota para no caer en las mismas trampas en las que yo misma he caído!
Principales Errores de las Mujeres en el Fitness
1. El Mito de la «Feminidad»:
Durante mucho tiempo, nos han vendido la idea de que las mujeres deben buscar ser «delgadas pero no demasiado musculosas».
Esta mentalidad no solo perpetúa estereotipos de género dañinos, sino que también limita nuestras verdaderas capacidades físicas.
Por eso uno de los mayores errores de las mujeres el mundo del fitness es el Miedo Infundado a las Pesas. Muchas mujeres evitan las pesas por temor a «ponerse muy musculosas». Pero la realidad es que levantar pesas es una de las formas más efectivas de mejorar la salud ósea, la composición corporal y el metabolismo.
El mito de que «las mujeres se pondrán grandes y voluminosas si levantan pesas» es simplemente eso, un mito.
La realidad es que las mujeres, en general, no tenemos los niveles de testosterona necesarios para desarrollar músculos grandes al estilo de los fisicoculturistas masculinos. Aunque es posible ganar músculo (y es saludable hacerlo), el proceso es lento y el resultado final no suele ser un aspecto «masculino», sino un tono muscular definido y saludable.
2. Programas de Ejercicios «Para Mujeres»:
Mira cualquier revista o sitio web orientado a mujeres y te bombardearán con rutinas que, en su mayoría, se enfocan en el cardio y ejercicios de bajo impacto.
¿El problema? Estos programas a menudo no nos desafían lo suficiente ni nos proporcionan los estímulos necesarios para realmente transformar nuestro cuerpo y salud.
Aunque algunos programas diseñados específicamente para mujeres pueden tener beneficios, es esencial abordarlos con un enfoque crítico. Las mujeres, como cualquier otro grupo, merecen programas de fitness que reconozcan y celebren su potencial completo, en lugar de limitarlo. Al final del día, el mejor programa es aquel que se adapta a las necesidades, objetivos y capacidades individuales, independientemente del género.
Por eso me gustaría profundizar más a fondo en este tema de los entrenamientos específicos para mujeres
¿Por qué son perjudiciales los entrenamientos específicos para mujeres?
Están más enfocados en la Estética que en la Funcionalidad:
A menudo, estos programas ponen un énfasis excesivo en áreas del cuerpo que se consideran «problemas» para las mujeres, como abdominales, glúteos o muslos.
Aunque no está mal querer tonificar estas áreas (¿quién no quiere unos glúteos firmes y un abdomen plano?), la obsesión con la estética puede eclipsar beneficios más integrales del ejercicio, como la fuerza funcional o la salud cardiovascular.
Falta de Desafío:
Estos programas, en muchos casos, subestiman lo que una mujer puede hacer.
Evitan completamente ejercicios compuestos y de resistencia, sugiriendo que las mujeres deberíamos limitarnos a pesos ligeros y movimientos repetitivos, en lugar de desafiarnos a nosotras mismas.
No Consideran la Individualidad:
Así como no todos los hombres tienen los mismos objetivos y capacidades físicas, lo mismo ocurre con las mujeres.
Los programas «para mujeres» a menudo pintan con un pincel muy amplio, sin tener en cuenta las metas, habilidades y desafíos individuales.
Falta de Educación en Fitness Integral:
Un buen programa de entrenamiento tiene que tener en cuenta la fuerza, la flexibilidad, el equilibrio y la resistencia cardiovascular.
Pero estos programas para mujeres a menudo se centran solo en uno o dos aspectos, lo que puede llevar a un enfoque de entrenamiento desequilibrado.
Refuerzo de Estereotipos de Género:
Al etiquetar un programa como «para mujeres», indirectamente se está sugiriendo que hay ejercicios o métodos de entrenamiento que no son «para mujeres».
Esto puede reforzar la idea de que las mujeres deben ejercitarse de una cierta manera, mientras que otras formas de entrenamiento son exclusivamente «para hombres».
3. El Peligro de las Dietas Moda:
El fitness no se limita al ejercicio; la nutrición juega un papel crucial. Sin una comprensión adecuada de cómo la alimentación influye en los resultados, es fácil caer en dietas dañinas o ineficaces.
Las dietas restrictivas y las tendencias que prometen pérdidas de peso rápidas son especialmente populares entre las mujeres. Pero estas soluciones rápidas a menudo son insostenibles y pueden causar daño metabólico a largo plazo.
Falta de Educación Sobre la Menstruación y Entrenamiento:
Muchas mujeres ni siquiera se dan cuenta de cómo sus ciclos menstruales pueden afectar su rendimiento en el entrenamiento.
Es fundamental entender las fases de tu ciclo para adaptar tu entrenamiento y nutrición en consecuencia.
4. Suplementación Innecesaria:
Las empresas de suplementos a menudo comercializan productos específicos «para mujeres», pero si estás pensando que es porque piensan en nosotras y en nuestras necesidades ¡Estás equivocada!
Simplemente son versiones más caras (y a menudo menos efectivas) que sus versiones «normales».
Además, no todas las mujeres necesitan suplementos. La clave está en escuchar a tu cuerpo y consultar a profesionales en lugar de caer en la publicidad engañosa.
5. Cultura de la Imagen Perfecta:
Querer convertirte en la mejor versión de ti misma no tiene nada de malo.
El problema es que las redes sociales y las revistas están llenas de imágenes de mujeres con cuerpos «perfectos pero irreales».
Seguro que no sólo me pasa a mi, todos tendemos a compararnos con los demás, y no nos engañemos, no nos fijamos en gente con cuerpos normativos, nos fijamos en esos cuerpos perfectos que en la mayoría de las ocasiones ni siquiera son reales. ¡Y eso es un error de los gordos!.
No nos podemos poner objetivos basados en lo que vemos en otras mujeres, nos tenemos que poner objetivos realistas para nuestro propio cuerpo y situación.
Esta constante exposición puede hacer que muchas se sientan inadecuadas, impulsándolas a entrenamientos y dietas extremas que a menudo son perjudiciales.
Si quires saber algo que nadie te va a decir de tu cuerpo no te pierdas este vídeo ⬇️
6. Impaciencia:
Vivimos en una cultura de gratificación instantánea. Esto puede trasladarse al mundo del fitness, llevando a que las mujeres (bueno, y también los hombres) queramos cambios inmediatos.
Los resultados inmediatos no existen. No comprender que el fitness es una carrera de resistencia y no un sprint puede generar frustraciones y desmotivación al no ver resultados rápidos.
💪 Si te interesa el tema, aquí te hablo de cuanto se tarda en tener cambios físicos
Ahora que ya sabes cuáles son los errores más comunes, espero que te sientas más preparada para enfrentar tu viaje fitness. ¡Ánimo, valiente! Y recuerda, no se trata de ser perfecta, sino de ser la mejor versión de ti misma. 💪❤️